La Cátedra en Ambito

Compartimos la entrevista de Federico Walls al Cardenal Hummes en su reunión con la Cátedra del miércoles 16 de septiembre en Buenos Aires.

Claudio Hummes sobre el Papa: «Es un Francisco de Asís actualizado»

De fugaz paso por Buenos Aires, el creador de la frase que inspiró a Francisco compartió conámbito.com su testimonio sobre el papado y los desafíos que enfrenta la Iglesia.

De Francisco le encanta la transparencia que tiene con la gente, su autenticidad y el estar despreocupado por lo que puedan decir sobre él. Lo reconoce de una profunda espiritualidad y un hombre de Dios. «Francisco es un hombre que tiene la capacidad de captar la realidad concreta del mundo de hoy de una forma extraordinaria», resume quien pasó a la historia por una frase que le dijo al Papa.

Actualmente prefecto emérito de la Congregación para el Clero en la curia romana, estuvo unas horas en Buenos Aires invitado por la Cátedra del Diálogo y la Cultura del Encuentro donde dio su testimonio acerca de los temas que se plantea la Iglesia hoy, especialmente en Laudato Si’.

Creado cardenal por Juan Pablo II el 21 de febrero de 2001 en el mismo consistorio que Jorge Bergoglio, no se conocían de antes. Recién en el 2007 cuando los obispos latinoamericanos se congregaron en Aparecida, Bergoglio y Claudio Hummes (de él se trata) compartieron extensas horas de trabajo en la comisión que redactó el documento final. «Recuerdo su gran capacidad de trabajo y espíritu pastoral misionero» dice quien sucedió al recordado cardenal Paulo Arns al frente del arzobispado de San Pablo.

A sus 81 años, se define como «un pobre hombre que Dios llamó a su ministerio, y que fui conducido por caminos que fueron una sorpresa» y agradece a Dios que lo haya llevado por esos «largos caminos» que hoy lo mantienen ocupado y con gran vitalidad, especialmente en la defensa de la región amazónica -que abarca gran parte del territorio brasilero- y de la promoción de la Red Eclesial Pan Amazónica.

«Es una red que comprende los 8 países integrantes de la Amazonia y consiste en un trabajo pastoral de dar apoyo a las iglesias locales y mostrar presencia territorial» con un sentido de integración con el resto del país, respetando la identidad de cada una de las comunidades, especialmente los pueblos originarios. Para el cardenal Hummes, la aparición de Laudato Si´ es un punto de inflexión en la legitimidad para hablar sobre temas ambientales ya que «el Papa muestra como esto tiene una dimensión religiosa, ética y social» íntimamente ligada a la creación y el cuidado de la Tierra.

Periodista: Usted se encuentra comprometido con la problemática del Amazonas pero a lo largo de su vida lo ha estado fuertemente con otras causas sociales, como las luchas sindicales.
Claudio Hummes: Sí, eso fue en la diócesis de San André (llamada región del ABC por las diócesis de Santo André, San Bernardo y San Caetano vecinas a la ciudad de San Pablo) que es una zona periférica de gran concentración industrial con presencia de empresas multinacionales, especialmente automotrices. Fui su obispo 21 años -de 1975 a 1996- y recuerdo que había 270 mil metalúrgicos… ahí conocí a Lula y todo su trabajo por crear un nuevo sindicalismo y redemocratizar el país! Luego me enviaron a Fortaleza, donde conocí la pobreza de la región del nordeste y para mí también fue una gran escuela. Después me enviaron a San Pablo (fue su arzobispo desde 1998 hasta 2006).
P: Imagino que al estar al frente de la diócesis mas grande de Brasil y la segunda de América se habrá encontrado con esa tensión entre los que mas tienen y los que no.
CH: Y además trabajar con el legado del gran cardenal Arns, que vive todavía y fue el hombre de los derechos humanos, el hombre que resistió fuertemente a la dictadura militar. Yo fui su «vecino» mientras estuve como obispo en la región del ABC.
P: ¿Que recuerda de esos años?
CH: Antes era un fraile franciscano del sur del Brasil además de profesor de filosofía, que me había doctorado y enseñaba; pero el Papa me llama para ser obispo de Santo André y todavía era tiempo de la dictadura militar, de una dictadura fuertemente represiva; no había espacio para ningún tipo de huelgas y los líderes sindicales estaban prácticamente en la clandestinidad o presos.

La experiencia de esos años viviendo en carne propia la pobreza y la cuestión social, luchando junto a los obreros contra el régimen militar, le «abrieron los ojos». Reconoce que aprendió «en concreto» como era la «justicia social» que había leído en los libros; como los obreros organizados se tornaron una fuerza invencible para los militares. Para Hummes esto es un ejemplo de cómo la sociedad civil puede organizarse y ser una resistencia contra poderes absolutos, siempre de manera pacífica.

P: Cuando el 13 de marzo de 2013 le dijo a Francisco «No te olvides de los pobres», le habrán venido a la memoria los recuerdos de esos años de lucha y pobreza.
CH: Es verdad. Pero también es cierto que yo no había preparado nada! Me salió espontáneamente! Fue el Espíritu Santo que habló por mi boca… no hay otra explicación sobretodo porque no pensé en el efecto que podía causar en el Papa pero él se quedó pensando y eligió llamarse Francisco. Y así comenzó a trabajar su programa de pastoreo que tiene tres grandes temas: los pobres y las periferias; la paz y los conflictos alrededor del mundo y la Creación, la naturaleza. Son los grandes temas que constantemente vuelven sobre su camino. Ciertamente está aquí un Francisco de Asís actualizado.
P: ¿Y cuáles son los desafíos que ve en este papado?
CH: El Papa nos deja un mensaje fuerte: la gente, si canta con Jesucristo por el testimonio de misericordia, atrae, hace la diferencia. Una Iglesia que es misericordiosa y no esta preocupada consigo misma sino que esta preocupada por la gente que sufre, no cae en la mundanidad. Es la misericordia de Dios que se olvida de sí misma y piensa en nosotros… Si la Iglesia es misericordiosa, entonces será como una luz que atrae.

Mientras su mano se sostiene en la Cruz del Buen Pastor que cuelga de su cuello, la misma que usa Francisco, Hummes pide que todos vayamos a las periferias, al encuentro del otro, dejando de lado nuestra natural tendencia a la autorreferencialidad que nos lleva a pensar en nuestra propia felicidad y comodidad.

Fuente: http://www.ambito.com/noticia.asp?id=808091

Translate »