Con la participación del papa Francisco confirmada para el cierre, expertos argentinos y de los cinco continentes participarán este jueves y viernes en el Vaticano de un encuentro para «resaltar el derecho humano al agua» tras el que firmarán una declaración para «pedirle a los gobiernos de todo el mundo un compromiso claro en la materia».
El encuentro es co-organizado por la Cátedra del Diálogo y la Cultura del Encuentro que dirige el argentino Luis Liberman, quien confirmó a Télam el cronograma del seminario y adelantó que durante el evento se presentará también el proyecto de «Universidad del Agua» que impulsan en Argentina con la Fundación de los Trabajadores Sanitaristas para la Formación y el Desarrollo (FUTRASAFODE).
Este miércoles, en esa dirección, el Pontífice criticó durante la audiencia general que si bien «el agua es una cosa bellísima y muy importante; que nos da la vida y nos ayuda en todo, para explotar los minerales se contamina el agua, se ensucia la creación y se destruye la creación».
«La universidad no solo actúa como un reconocimiento al ascenso social de los trabajadores sino también como una política de anticipación a los cambios que se vendrán en el mercado de trabajo, con la preocupación de la sustitución de oficios por vía de la tecnología», agregó Liberman.
«El seminario es una plataforma par globalizar este debate. Los trabajadores suelen ser excluidos de esa discusión, y en la cátedra del diálogo discutimos quiénes deben ser convocados a ese diálogo», detalló.
«El Estado debe conducir las políticas públicas, el sector privado tiene que contribuir en la inversión, pero en la decisión de cómo se desarrolla la política pública del servicio del agua, porque eso ha generado más que nada fragmentación, y eso no es eficaz», describió.
«Es un hecho inédito el marco en el que se da el encuentro. En la encíclica Laudato Si’ Francisco plantea esto claramente, donde plantea los peligros que tiene el mundo frente a un tema vital y escaso como es el agua potable», indicó por su parte Lingeri.
«Nosotros consideramos que el agua es vida. Debe haber políticas de Estado que le den sustento a esto», reclamó Lingeri, antes de adelantar que la declaración que firmarán el viernes los participantes buscará «que esto se materialice en el tiempo, y más que una cuestión declamativa sea algo positivo y se concrete en hechos. Es una responsabilidad de los gobernantes».